Descubre tus horas de Máximo Rendimiento

La mejor estructura no garantizará los resultados ni el rendimiento. Pero la estructura equivocada es una garantía de fracaso (Peter Drucker)

Si sabes aprovechar las horas en las que tu energía es máxima y tu mente está a pleno rendimiento, avanzarás más y mejor en todas tus tareas y tu creatividad y productividad se disparará.


Todos tenemos unos periodos a lo largo del día en el que disponemos de mayor energía y otros en los que nuestro rendimiento cae, ya sea por cansancio o por que biológicamente nuestro cuerpo está habituado a rendir menos. Determina cuáles son tus dos horas de máximo rendimiento, en las que más energía tienes durante tu jornada, y aprovéchate de ellas.

Sabiendo que vas a disponer de toda tu lucidez y capacidad, exprímelas y mantente enfocado en tus tareas. Si tienes la posibilidad de dedicar ese periodo a realizar tareas que requieran más esfuerzo mental, no lo dudes, aprovéchalas y dedica los momentos de menor capacidad para hacer tareas que no requieran tanto esfuerzo intelectual o creativo. 

¿Eres de mañana o de noche?

Mucha gente usa la estrategia de levantarse muy pronto para comenzar la jornada y así ser más productivo. Es muy válida siempre que hayas dormido las horas suficientes. Esto implica que si quieres levantarte a las 6 de la mañana porque quieres hacer deporte antes de ir a trabajar, estupendo, pero no por ello debes restar horas de sueño. 

La base de toda la eficiencia y bienestar personales se basa en el equilibrio y saber aprovechar los momentos de la mejor manera posible pero sin descuidar la propia salud y descanso necesarios. 

En cambio, hay personas para las que la tarde/noche es el momento de mayor rendimiento personal. Prefieren estudiar, escribir o trabajar tras los rayos de sol. Así se sienten mejor y con más concentración. 

Tus 2 horas de más energía

Durante la próxima semana me gustaría que analizaras tu día en el trabajo y determinaras cuáles son tus dos horas en los que tu energía física y mental es mayor. Hay días que por diversas circunstancias verás alterado tu momento, pero por norma tu cuerpo es adaptativo y si cada día tienes unos horarios estables, tu alimentación es la adecuada y te proporciona un aporte de energía constante, al final el rendimiento será el mismo a las mismas horas. 

Anótalas e intenta concentrar en ese periodo las tareas que requieran más esfuerzo. Ya sea porque necesitas realizar más esfuerzo mental o tener mayor creatividad. O incluso siendo tareas que no requieran mucho esfuerzo concentra allí la más arduas ya que de esta manera las realizarás con más eficiencia y el aprovechamiento de esas horas será mayor.

Si trabajas en horario partido y tienes que comer en medio de tu jornada laboral sabrás que volver a retomar la actividad justo después de la comida se hace duro. El cuerpo se relaja y cuesta volver a conectar. Para estos casos es muy recomendable que la comida sea ligera para que la digestión no sea tan pesada

Para retomar la actividad, si tienes algo que hacer que implique estar en movimiento, como ir a ver a un cliente o dar una vuelta por la planta éste sería el mejor momento para hacerlo. Mejor que sentarte delante del ordenador de nuevo. De esta manera vences ese momento de baja energía con el movimiento que genera el aumento de actividad.

Si puedes escuchar música en el trabajo, utilízala para los momentos que necesites un empujón o para los que necesites más concentración. Es una de las formas más efectivas de darle a tu cerebro en cada momento el tempo que necesita.

Consejos para aumentar la duración de tus periodos de máxima energía


  • Cuida la alimentación: un desayuno adecuado y con un aporte energético apropiado hará que tu energía tarde más en caer. Nada de un café con leche y a trabajar.
  • Mantente en buena forma física. Deporte diario, o por lo menos de 3 a 4 horas semanales combinando ejercicio aeróbico y de fuerza hará que tu cuerpo y tu mente sean capaces de aguantar más horas y aumentar el rendimiento.
  • Sigue un programa propio de relajación y concentración mental practicando diferentes técnicas como pueden ser el mindfulness, la relajación guiada y/o yoga para estirar y relajar el cuerpo.
  • Establece descansos periódicos en tu jornada de trabajo. cada máximo 90 minutos dedica 5 a relajarte y cambiar de actividad. Pocas veces somos conscientes de que parar por un rato es mucho más beneficioso y productivo que continuar durante horas.
  • Adecúa las tareas a tu estado y a las condicionesDavid Allen, en su metodología GTD, habla sobre esto: elegir las tareas en función del tiempo y energía disponibles. Algo natural pero que pocas personas aplican.
  • Evita las distracciones evitables ya que como dije en este artículo,  Las interrupciones forman parte de tu trabajo pero hay algunas que podemos eliminar.
  • Hidrátate a menudo. El cerebro necesita agua. un cerebro deshidratado funciona peor.
  • Si puedes elegir, mejor luz natural a la artificial, siempre. La luz artificial no mola. La luz natural da vida.

¿Estás dispuesto a aumentar tu rendimiento?

Me encantaría que me explicaras cómo lo haces.

Un abrazo.
Carlos.