Introducción al Método GTD


Puedes hacer cualquier cosa, pero no todo (David Allen).

Hoy os explicaré en que se basa el famoso método de organización GTD®Getting Things Done® desarrollado por David Allen, el cual yo sigo para la gestión de mis tareas y proyectos.

Esa filosofía de gestión del tiempo y de las tareas se puede aplicar no sólo a tu trabajo sino también a tu vida personal. Para mí, supuso un cambio radical en mi forma de trabajar, haciendo que el estrés y la falta de control desapareciera y mi productividad y relajación aumentaran.

Mucha gente piensa que estos métodos conllevan mucho tiempo de aprendizaje o son complejos y sólo son para gente determinada; nada más lejos de la realidad. 

Si crees que necesitas organizarte mejor, reducir el estrés o percibes que no tienes el control suficiente tus tareas diarias o deseas mejorar tu productividad; al fin y al cabo, vivir mejor, merece la pena dedicar un poco de tiempo a ir poniendo en práctica poco a poco éste método o cualquier otro que se adapte a vosotros. Para mí este es el mejor con diferencia.

EL LIBRO

El método se desarrolla en el libro Getting Thigs Done®, the art of stress-free productivity (En español, Organízate con eficacia: máxima productividad personal sin estrés).


En 2015 David Allen, sacó una nueva edición revisada con nuevos comentarios. Asimismo, existen diversos libros del autor que ahondan más en esta metodología y nos indican más claves para mejorar nuestra productividad y nuestra forma de gestionar nuestras actividades.


  Fuente: www.gettingthingsdone.com

EL MÉTODO

El método nos enseña a en sacar todas las ideas de la cabeza, ponerlas en un sistema confiable al que tú sabes que vas a recurrir frecuentemente, determinar cuál es la acción siguiente para llevar a cabo esa tarea y liberar la mente, dejándola que se concentre en la siguiente acción y sólo en eso.

Se basa en 5 pasos muy claros:

1. Recopilar. Recopila todo lo que genere tu atención, personal y profesional, ideas, tareas, notas, mediante una libreta, bloc de notas, móvil, nota de audio, bandeja de entrada, etc.

2. Procesar. Coge todo lo anterior y pregúntale: ¿se puede hacer algo con eso? Si no, tíralo, guárdalo o archívalo como referencia. Si es que sí, decide qué siguiente acción debes hacer para completarla. Si requiere menos de dos minutos, hazla, si no, delégala si puedes o anótala en una lista para hacerla en cuanto puedas.

3. Organizar. Pon recordatorios en los sitios apropiados. Crea listas de tareas, anota en la agenda los compromisos, etc.

4. Revisar. Revisa estas listas tan frecuentemente como sea posible para decidir cuál es tu siguiente acción. Realiza una revisión semanal de todo tu ámbito de acción.

5. Hacer. Usa tu sistema para decidir qué siguiente acción llevarás a cabo y hazla.

Se habla y se escribe mucho acerca de GTD®. Podéis encontrar muchos artículos y guías en internet acerca del método y aunque aquí explicaré detalladamente como funciona, me centraré más en la aplicación global a la vida en general que los fundamentos de GTD® (el sacar todo de la cabeza para ponerlo en un sistema confiable que te permita relajar la mente) nos aporta y cómo nos hace sentirnos mejor.

Detrás del aspecto más técnico de organización de tareas que aporta el método, está el aspecto mental que te genera, que es el que más me fascina y en el que el autor pone mucho énfasis. Ésta filosofía se puede aplicar a cualquier aspecto de la vida, ayudando a mejorarla.

En el blog iré poco a poco explicando el método en profundidad y a su vez os iré contando como lo moldeo para aplicarlo en mi trabajo y todo lo que sigo aprendiendo.

No creáis que lo he podido poner en marcha de la noche a la mañana, durante varios años he ido poco a poco introduciéndolo en mi trabajo y ha supuesto, como he dicho antes, un cambio sustancial en mi forma de trabajar.

Esto ha sido una primera pincelada acerca del método, una primera toma de contacto.

Próximamente os dejaré un diagrama de flujo del método donde se ve muy bien cómo funciona el sistema.